Abstract
La doctrina penal considera que la regulación penal de la falsedad documental, heredera de la tradición jurídica francesa-española, tiene su fundamento en la protección de la "autenticidad", porque no existe un derecho "general" a la verdad. En esto se diferenciaría de la regulación penal de la falsedad documental en Alemania, en cuya tradición jurídica precisamente se planteó la existencia de tal derecho y su negación. Sin embargo, ambas tradiciones tienen un origen común, que hunde sus raíces en el castigo del crimen falsi en el Derecho romano. A partir de la indagación en estas raíces, la siguiente revisión histórico-dogmática pretende mostrar que la falsedad documental se desglosa del "crimen de falsedad" y que su injusto no puede ser esclarecido sin recurrir al derecho a la verdad.